“Quise ahorrar un par de licencias para mi empresa, no sabía dónde me metía, literalmente”

Y es que, a Pedro, el jefe de la empresa, se le ocurrió una brillantez, ahorrarse el pago de las licencias de varios programas informáticos en distintos equipos de la oficina.

Cuando lo gratis sale caro…

Necesitaba preparar algunos documentos en otros idiomas, utilizó una aplicación de traducciones gratis y no oficial. Copió y pegó un contrato con datos personales y bancarios. Obtuvo la traducción y se ganó una sanción de la Agencia Española de Protección de Datos. Eva, estaba preparando el lanzamiento de un nuevo producto de la empresa, y para ello debía enviar un artículo con vídeo muy pesado que subió a la nube. Allí lo convirtió en PDF, incluyendo la agenda de sus clientes. La plataforma sufrió una brecha de seguridad y casi pierde el trabajo.

Y luego está Leonardo. Leonardo es dentista y trabaja con un calendario compartido que, por error, han leído todos sus pacientes. Leonardo desconoce que hasta Google incumple la gestión europea de datos (aunque ha prometido acatarla a finales de 2023).

Y entonces…

Leonardo se creó un problema muy grave porque los datos de salud son extremadamente delicados. Menos mal tenían un Ciberseguro que le prestó Defensa Jurídica y asumió su Responsabilidad Civil. Sin él, hubiera tenido que pagar a los damnificados y, tal vez, hubiera quebrado. Hoy internet nos conecta a cualquier rincón del mundo y, a su vez, abre nuestros dispositivos (ordenador, teléfono, tablet) a cualquier rufián. Por eso, el mejor antivirus de tu empresa es un Ciberseguro. ¡Nunca lo olvides!

comparativa