Ni la pagas tú, ni la Seguridad Social, ni los centros privados. Tu rehabilitación la paga tu Seguro a través de los convenios de asistencia sanitaria que firman las compañías de seguros, el Consorcio de Compensación de Seguros y los centros médicos. Como paciente lesionado tienes derecho a continuar recibiendo tratamiento médico y/o de fisioterapia hasta tu total recuperación. Tienes garantizada la asistencia sanitaria integral, tanto hospitalaria como ambulatoria hasta tu total sanación o estabilización de las secuelas. Si te llevan a Urgencias en un centro público y después quieres trasladarte a uno privado incluido en el convenio, podrás hacerlo gratuitamente. Cuando la culpa es tuya, los gastos los asume tu compañía. Si es del otro, se reclaman a la aseguradora del otro conductor. Un dato: el último año, el Sector Asegurador pagó más 480.000 servicios de rehabilitación, lo que supone un desembolso de más de 9,3 millones de euros.