«Mamá dice que hemos disfrutado la baja de maternidad a tope. Ahora le toca volver al trabajo y yo iré a la guardería. Voy a conocer un montón de amiguitas nuevas».
¿Tú crees que trabajará tranquila? ¡Claro que sí! Es una mamá organizada. Y Clara
aprenderá divirtiéndose junto con sus compañeros y compañeras, a compartir, a comer sola, a ser autosuficiente. Una guardería debe estar bien cubierta, para proteger y estar prevenida de cualquier incidencia, accidente o reclamación. Por lo que deben tener un Seguro de Responsabilidad Civil que cubra su actividad, además de un Seguro de Accidentes para los niños y niñas, así como Asistencia Sanitaria. También debe tener un Seguro de Daños que cubra las instalaciones, y cómo no, un Seguro de Accidentes de Convenio que proteja al personal laboral.
Además, la mamá de Clara tenía contratado un buen Seguro de Salud, Clara ya lo
utilizó incluso antes de nacer: pues mamá había elegido para llevar su embarazo a
su ginecólogo de siempre, que está en el cuadro médico. Clara nació en ese mismo hospital y asistida por el mismo ginecólogo, haciendo sus funciones de obstetricia, así la pequeña estaría protegida por el mismo Seguro de Salud, tanto en su nacimiento como para sus primeros días de vida. Enseguida, mamá incluyó a Clara en su Seguro. Ahora también han elegido a su Especialista en Pediatría, así revisará siempre a Clara y se encargará de su salud, la misma persona; Alicia, que con el paso de los años se convierte en una amiga más de la familia.
