Este domingo, Ozzy (un cachorro Beagle de 8 meses) estaba paseando con su familia por un descampado próximo al vallado de la autovía. Corría tan feliz cuando un ruido inesperado le asustó. Ozzy cruzó la carretera desbocado y le atropelló un coche. Una gran pérdida, porque Ozzy ya se había convertido en un compañero de juegos, y con su amor había conseguido levantar el ánimo que a veces la vida nos quita y ahora la vida golpeaba otra vez por una fatal casualidad.
Aún hay más… El coche que lo atropelló sufrió un accidente grave con grúa y guardia civil incluidos. Gracias a la suerte, los ocupantes salieron ilesos, pero…
¿Y si Ozzy hubiera provocado una colisión en cadena de varios vehículos? ¿Y si hubiera acarreado consecuencias más graves como una lesión o un fallecimiento?
Creemos que cualquier mascota está incluida en el seguro de Hogar (los animales potencialmente peligrosos van aparte, pues necesitan un seguro obligatorio). Pero no siempre es así.
Con una póliza mal contratada por internet o por tu banco, o incluso muy antigua, esta familia hubiera tenido que asumir el 100% de la indemnización. Afortunadamente, los familiares de Ozzy son clientes de nuestra correduría e incluimos en el seguro al cariñoso Beagle junto a su compañero de alfombra, Miau, que es un lindo gatito siamés.
Agregar a las mascotas en el seguro suele ser gratuito. Sin embargo, no basta solo contratarla. Te recomendamos revisar los límites de los capitales asegurados, las indemnizaciones y las exclusiones (pueden ser por razas, por número de animales…) Y, así todos tan felices.
Es muy importante tenerlo en cuenta, especialmente en Navidad, que el número de adopciones aumenta.